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Victoria clara en una noche en la Simeone decidió introducir dos cambios de peso en el centro del campo (Tiago por Mario y Raúl García por Koke) que fueron protagonistas del encuentro por su desempeño y por marcar 3 de los 5 goles anotados. Mención especial merece que Simeone decidiera alinear a Adrián quizás lanzando un mensaje al club del que destacó su valía y volvió a insistir en que esperaba que se quedara. Echó balones fuera sobre posibles llegadas, aunque prevé movimientos y lanzó un aviso a navegantes sobre las filtraciones. Paco Jémez por su parte muy enfadado por la complacencia de club y jugadores protagonizó la «rajada» de la noche.

En la primera parte de este artículo repasamos los datos que dan origen a la actual preocupación (¿debería decir terror?) reinante entre los directivos deportivos. Hecha la ley, hecha la trampa reza el refranero. Hacienda ya no puede encubrir la astronómica deuda del fútbol español. A todo esto aún no hemos hablado de la tercera pata, el cambio en la ley concursal. Los días de clubes entrampados llegarán pronto a su fin. La ley concursal lejos de ser una salvación como hasta ahora será motivo de descenso inmediato a Segunda B.

Nunca antes un parón de Liga por selecciones se había pasado con tanto gusto. Hubiera sido lo normal ver a aficionados quejarse por no poder ver a su equipo durante tanto tiempo, con un fin de semana sin fútbol de por medio, tan sólo tras 3 jornadas del inicio de Liga. Sin embargo, los colchoneros hemos pasado el parón felices, muy tranquilos, con visitas a Neptuno incluídas. Hemos tenido 15 días para disfrutar tranquilamente de nuestra nueva Supercopa de Europa y casi ni nos hemos acordado de la Liga.

En un mercado de fichajes marcado por la terrible crisis económica que también afecta al fútbol, el Atlético de Madrid ha sido uno de los grandes protagonistas, aunque en el capítulo de salidas. Fran Mérida ha sido la única incorporación en un equipo que ha visto como salían José Antonio Reyes, Jorge Pulido, Diego Costa y Joel Robles. En el caso de estos tres últimos, su destino, en forma de cesión, es el Rayo Vallecano en una operación que apunta a ser extraordinaria a tres bandas.

Tras el encuentro disputado en Glasgow, escribía que los resultados suelen confundirse con la calidad del fútbol que desarrollan los equipos. Por el resultado que obtuvo el Atlético de Madrid en el partido contra el Rayo, podría deducirse que los colchoneros fueron superiores a los rayistas. Nada más lejos de la realidad. Una gran parte del partido fue de dominio vallecano, sobre todo durante la primera parte.
Desde el principio del choque, el Rayo presionó en la zona de zagueros al Atleti.

Manzano compareció, como viene siendo habitual, con gesto contrariado a sala de prensa. Muestra, tal vez, de que el resultado, no ha sido un fiel reflejo del juego mostrado por el equipo. Parco en palabras -más de lo habitual- el análisis ha sido claro: «Hemos tenido que sufrir para abrir el marcador. La pegada ha sido suficiente para solucionar un partido difícil debido al buen planteamiento del equipo rival».

El Atlético jugará mañana su tercer derbi madrileño en apenas un mes, tras caer ante Getafe y Real Madrid. Esta vez será ante el Rayo Vallecano, que vuelve a Primera tras 8 años en el exilio, en horario casi matutino (12:00, GolT y Canal+Liga). Enfrente también estará Movilla que busca quitarse una espinita que lleva escociendo demasiados años. ¿No se animan a ir al estadio y cantarle a Manzano aquello de «dónde está el siete»?