Había ambiente en el Calderón de partido importante. Todos lo son, en realidad, pero vistos los resultados de la jornada del sábado, los tres puntos que se jugaba el Atlético de Madrid cobraban bastante trascendencia. Porque podía distanciar aún más a los rivales que ayer no ganaron sus partidos y porque afrontaría con mucha más moral, confianza y más puntos el derbi del próximo sábado.
El equipo correspondió a lo que le pedía la importancia del partido.