Se consumó. Se había consumado. Según De Gea solo hace tres días. Según el resto del planeta hacía varios meses. El ex portero del Atleti ha estado jugando al gato y al ratón durante demasiado tiempo. Ha representado una comedia que ha tenido su desenlace, de sobra conocido, en la tarde de ayer.
Todos han tenido su papel en la penosa representación de una obra ya repetida en demasiadas ocasiones en los últimos tiempos.