Se invocó al espíritu de las grandes remontadas. El del Real Madrid del miedo escénico. El del Madrid capaz de lo imposible. La prensa madridista oficialista, es decir casi toda, puso en marcha su poderosa maquinaria para que el equipo blanco eliminara al Atlético de Madrid y así, poder tener una nueva edición de un Barça – Real Madrid.
Pero la caverna mediática no puede saltar al césped.