Con el buen sabor de boca que dejó la victoria frente al Granada aún presente en los aficionados rojiblancos, el Atleti encara la parte más complicada del calendario con tres objetivos. El primero y más necesario por el componente económico, es asegurar la tercera plaza. El segundo, por proximidad en el tiempo, es vencer al Madrid y romper esa nefasta racha que ya dura demasiado. El tercero y último, pero igual de importante que el anterior, es quedar por encima del eterno rival al final de la Liga.