Era ampliamente conocido que el BM. Atlético de Madrid no pasaba por su mejor momento económico. Fueron varias las señales que hacían presagiar un futuro negro para la sección colchonera de balonmano: La salida precipitada de Markussen a mitad de temporada, la renuncia de Domingo Díaz de Mera a seguir involucrándose en el club y su posterior «lío» con el caso Nóos, la rajada de Kallman, diciendo que veía muy difícil seguir en un club que no le pagaba lo que le debía