No es la primera, pero a nada que se asomen a la calle se darán cuenta de que ésta Supercopa ha trascendido mucho más que la que se ganó contra el Inter. Lo harán comprobado, con cualquiera que hablen lo primero que les dirán será: ¡Vaya partido que hizo el Atleti! Y se les habrá henchido el corazón colchonero como a mí.
El Chelsea es un gran equipo, pero no era menos aquel Inter tricampeón en el año 2010. El Atleti también realizó un gran encuentro. Superó a la escuadra italiana con holgura y logró el primer doblete europeo de la historia rojiblanca. El caso es que esta victoria ha dado la vuelta al mundo y para mí que tiene mucho que ver los tres goles de Falcao.
El colombiano se destapó con un estupendo trío de goles apoderándose a la vez del trono de mejor delantero centro del momento. La precisión de los tres remates a puerta y la plasticidad de los goles habrá sorprendido a extraños, pero no a propios que ya hemos visto goles fantásticos suyos, como en la semifinal contra el Valencia o los dos de Bucarest.
Falcao anotó un buen número de goles el año pasado y amenaza a los rivales con incrementar esa cifra de forma espectacular. Claro que sus compañeros están encantados con él. Su única preocupación es hacerle llegar la pelota en buena disposición en los alrededores del área, Falcao, ya se encargará de meterla. Fue uno de los hombres del encuentro.
El otro protagonista fue Simeone. Vivió un partido que puede que le haya cambiado la carrera profesional. Tengo la sensación de que es así. La táctica empleada por el argentino desarmó la de Di Matteo durante todo el partido. La estructura del equipo fue tan sólida que no encontraron ningún resquicio por donde colarse. La ambición y la mentalización que les indujo a los jugadores completan las características que debe tener un gran entrenador.
Vive cada jugada como si fuera la última, cada gol como si le diera un campeonato y cada partido como si la vida le fuera en ello. El seguidor atlético, privado reiteradamente de sus estrellas del césped, sigue la estela que marca su entrenador. En él ha encontrado el ídolo que necesita para seguir creyendo.
Lo de Simeone puede que les sorprenda a muchos, pero yo que lo disfruté como jugador del Aleti no, tiene el mismo espiritu ganador como entrenador, ha inculcado que se pelee cada balón como si fuesen perdiendo aunque estén por delante 4-0, concentración y presión desde el minuto 1 al final, no se da un balón por perdido, saca de cada jugador el maximo provecho, y a Falcao le ha venido de lujo por que cada día va a más. Lo dicho la mejor estrella de este Aleti es el Clolo, por encima de Falcao, Arda, etc. FORZA ALETI.
ESTE AÑO SI.