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Esta noche cuando cuando salgan los 11 gladiadores rojiblancos al campo deben hacer tres cosas: mirar la pancarta que les dejó ayer el Frente Atlético, pensar en la final de Copa del Rey de 1992 y repetir dos palabras: «Luis Aragonés».

1992 Final de la Copa del Rey contra el Real Madrid. Ese partido que si lo jugaramos mil veces, mil veces lo ganaríamos. El partido que ganó Luis Aragonés desde el vestuario. Contaba el atleticólogo Jose Antonio Martín más conocido como Petón hace un año una anécdota largamente conocida pero que pocos como él sabe relatar tan bien en un homenaje muy entrañable a Luis Aragonés. Ese homenaje denominado «Gaudeamus» -del que fuimos privilegiados testigos en los inicios de «Esto es Atleti» – fue auspiciado por aficionados de a pie rojiblancos y con la participación de esa conciencia colectiva y especie de memoria histórica en la que se ha convertido Señales de Humo. Decía Petón que Luis Aragonés se dirigió a los jugadores en el vestuario explicándoles largo y tendido en una pizarra esquemas tácticos, movimientos, alternativas si el resultado iba en una u otra dirección y tras hacer una larga pausa mirando al suelo levantó los ojos y les dijo a sus jugadores una palabras parecidas a estas:

“Han visto lo que les he explicado ¿Lo han entendido? Preguntó ¿lo han entendido? ¿Sí? Pues esto,… golpeando la pizarra, esto… ¡no vale para nada! ¡Lo que vale es que sois mejores y que estoy hasta los huevos de perder con estos, de perder en este campo[Final en el Santiago Bernabeu]! Lo que vale es que sois el Atleti de Madrid y hay 50000 dentro que van a morir por vosotros, hay que morir por ellos, por la camiseta, por vuestro orgullo, hay que salir y decir en el campo que solo hay un campeon y va de rojo y blanco.”

Que los jugadores salgan hoy al campo después de repetirse «Luis Aragonés» y miren a la izquierda del campo; estará la mitad del trabajo hecho.

(Foto: Hugo Condés a través de Twitter: https://twitter.com/#!/HugoCondesSER/status/189762709389180928/photo/1)