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En la presentación de la nueva Quiniela le preguntaron a Enrique Cerezo sobre la posible vuelta de Tiago, a lo que aquél respondió: «El arrepentimiento hay que hacerlo a tiempo«. Lo que todo el mundo interpretó como que Tiago no tenía ninguna posibilidad de pudiera llegar a un acuerdo con el Atlético de Madrid. A las pocas horas la cuenta oficial de twitter del club anunciaba el compromiso que habían alcanzado para los dos próximos años.

No era necesario conocer este episodio para tener constancia de que el presidente del Atleti pinta muy poco en las decisiones del club. Ahora bien, no porque hayamos comprobado esto en multitud de ocasiones deja de ser reseñable que Cerezo vuelva a quedar en evidencia.

Sin embargo, a él no le importa nada quedar como Cagancho en Almagro una y otra vez con tal de seguir anclado en la poltrona del palco del Calderón. Al día siguiente, es decir hoy, ha dicho sobre el regreso de Tiago: «El arrepentimiento ha llegado a tiempo«. Impasible el ademán; aunque el lunes lo viera de color negro y hoy el color fuera blanco. Cerezo pretende que nos traguemos todo, y si bien es verdad que hay opiniones discrepantes entre la hinchada, a nadie se le escapa que este episodio es cuando menos bastante extraño. Incluso para algunos periodistas que suelen estar, casi siempre, en la línea oficialista que se marca desde las oficinas del Atlético de Madrid.

Ha reconocido que el Chelsea no pagó la cláusula de rescisión por Filipe Luis, aunque por poco, ¡eh!; desdiciendo la promesa de Gil Marín. Pero claro, escribir promesa y Gil en la misma frase, ¡qué cosas tengo!

Cerezo ha tratado de tranquilizar a la afición con el discurso de siempre pronunciado en Los Ángeles de San Rafael. Ha dicho, sobre el supuesto interés del Atlético por Fernando Torres, que: “Hasta ahí no llego yo. Pero esta es una casa de buena acogida y aquí todo el que quiere venir es bien recibido”. Ha tratado, también, de insuflar ánimo a la gente, que anda bastante alicaída estos días porque ve que pasan los días y la plantilla no termina de completarse, que: “No me quiero equivocar, pero si se solucionan dos problemas que tenemos vamos a tener mejor equipo que el año pasado”.

A lo mejor el que se equivoca soy yo y en los próximos días conocemos las sorpresas que nos ha insinuado hoy el presidente, aunque si repasamos la trayectoria de promesas cumplidas que han hecho Gil y Cerezo no hay mucho lugar a la esperanza.

Foto: Club Atlético de Madrid.