Durante años la estrategia diseñada por Gil Marín y Cerezo fue la de convencer al personal de que nada podía hacerse para cambiar la situación deportiva del Atlético de Madrid debido a que la paupérrima situación económica impedía que el club pudiera fichar a los jugadores y al entrenador necesarios para sacar al equipo de la gravísima situación deportiva en la que se encontraba. Claro, nada decían de quiénes eran los responsables de que el club tuviera las arcas más vacías que el estómago de Carpanta.
Era muy difícil que colara esta suicida estrategia, pero ya sea por la destreza de sus ideólogos, por la colaboración mediática, por la estulticia de la afición, coló. Una vez que la gente se hubo hecho a la idea todo fue discurriendo según lo previsto. Esa suerte de maldición se instauró sobre la afición colchonera. Ante los sucesivos bochornos vividos cada temporada, sólo hubo la callada por respuesta. Si era imposible cambiar los designios divinos ¿para qué protestar? ¿para qué, ni siquiera, intentarlo? Nadie exigiría nada puesto que no había nada qué exigir.
Sólo un grupo de irreductibles, agrupados en torno a Señales de Humo, y unos pocos a título individual agitaban el árbol con entusiasmo a pesar de que casi nunca caía ninguna nuez. La mayoría de corderos estaba adormecida, mantenía un cómodo y plácido silencio. La frustración, la tristeza, en definitiva la resignación formó parte de nuestras vidas futboleras durante unos largos 15 años.
El Atlético nunca volvería a ser el que fue, es más, muchos ni sabían lo que había sido el Atleti. De eso se trataba, de que la afición nunca supiera la verdadera historia triunfante del Atlético de Madrid. Si lo hubiera sabido podría comparar y Gil y Cerezo saldrían perdiendo. La gente, entonces, podría amotinarse.
Así estaban las cosas cuando llegó Simeone para demostrar que el destino del Atlético de Madrid no estaba escrito. Desde luego, el destino, si lo hubiera, no era convertirse en un secundario del fútbol español y europeo. Se ha adaptado a lo que le han dado. Los mismos, básicamente, si no peores que fueron eliminados por el Albacete han ganado brillantemente tres títulos, rompieron la racha de derrotas contra el Real Madrid, tienen a tres puntos en la liga al mejor Barcelona de la historia y suenan entre los mentideros periodísticos como unos fiables candidatos al máximo título continental.
Ahora los corderos han roto su silencio, balan, y muy fuerte. Sus balidos atruenan. Lo seguirán haciendo mientras las cosas vayan rodadas. Luego, si el rumbo se tuerce, ojalá no, volverán al silencio y sólo se escuchará el grito de unos pocos.
¡Empatados a puntos ya con el Barça! Pelín exagerado lo de candidatos a la Champions, pero bueno! Muchas gracias por el artículo.
No hay muchos equipos mucho mejores que nosotros. Queda mucha temporada, hay que seguir.
Gracias a usted.
Desde luego en números en Liga solo nos supera el Bayern de Munich, que no ha perdido y solo ha cedido dos empates, eso si, con un partido menos.
También con un partido menos la Juve solo ha cedido un empate y una derrota, igual que el Atleti y el Barça.
Con los números en Liga de este Atleti hubiera sido lider en solitario en el noventa y tantos por ciento de los campeonatos de Liga jugados a estas alturas de la temporada
los corderos también conocidos como borregos o comepipas. Gran artículos. Una vez más, Forza Atleti demuetra su independencia, valentía y honradez. Enhora buena.
Gracias, Fernando.
Sin mirar al pasado el Atleti es el mejor equipo de Europa.FORZA ATLETI
Es mucho mejor mirar hacia el futuro que recordar el pasado, a no ser que sea para no volver a cometer los mismos errores.
Gracias por su comentario.
Adal: el fútbol ha cambiado, definitivamente. Por lo menos el español. Ahora, para ser campeón hay que estar a la altura del Barcelona y del Madrid. Lo bueno es que el Atleti es capaz de estarlo.
Un saludo.
Demasiados corderos sí. La gran mayoría de la grada del Calderón siempre le ha dado la razón a Cerezo cuando decía que la gente solo se quejaba cuando las cosas iban mal y, a veces, ni eso.
Si cuando se ganan títulos, se sigue escuchando el Gil cabrón, fuera del Calderón, el «Diles que se vayan», etc. la cosa cambia. Pero eso no pasa, mientras haya pipas y podamos hablar del Madrid… todo está bien.
Nuestro mayor rival no es el Madrid o el Barça, está en el Palco y robó el club. Perdón, no está en el Palco, porque le importa tan poco este equipo, que ni siquiera acude al estadio.
Un saludo desde http://www.paseomelancolicos.com.
Espero que esta época no se olvide, don WarioNeila86 y que cuando vengan mal dadas, ojalá sea lo más tarde posible, la gente se acuerde que hemos visto otro Atleti diferente del que nos han estado vendiendo durante tantos años.
Un saludo.
Por supuesto Julio, yo estoy encantado ahora mismo con la situación deportiva. Lo que pasa es que no me olvido de los años que he vivido en el Calderón desde el descenso hasta la Europa League de Quique Sánchez Flores, incluso después de eso con la venta de Agüero, De Gea, Domínguez…
Un saludo y sigue escribiendo así 😉
Gracias por sus aportaciones, don Wario.
Un saludo.