7/10/2013
Luz del día en las gradas, el irritante, a la vez que aromático olor del humo de los puros, los coñacs solos o con café. Las 5 de la tarde. Hora taurina y también futbolera. El domingo, el día de descanso, era el día del fútbol por tradición.
Las narraciones por la radio en las que el locutor de la emisora de turno llamaba a cada cosa por su nombre: cambios en vez de rotaciones, punta, ariete, estilete o delantero centro por 9. Defensa y también zaguero. Centrocampista y volante. Guardameta y cancerbero, además de portero. No había palos cortos ni largos, los dos eran iguales de tamaño y estaban colocados verticalmente y por eso se les decía postes y no palos. El horizontal era larguero o travesaño.
En aquella época, la del fútbol a las 5, la de los puros y el coñac, la de los locutores que dominaban el dificilísimo arte de contar un partido de fútbol con vocabulario rico y preciso, en aquella época el fútbol era de la gente. Y no me molesta que las cosas cambien, lo que me molesta es que ahora el fútbol ya no es de la gente.
Hoy el fútbol es de dos. Del Madrid y del Barcelona. De la Cope y de la Ser. De Punto Pelota y de Tiki-Taka. De Tebas y de Roures. De As y de Marca. De Gil Marín y de Cerezo. Ahora, más de dos, es una multitud.
Lo que estos dúos, que no duplas, no pueden quitarnos es la pelota. Ni el Atleti de Simeone. Tiene este Atleti un acento muy marcado de fútbol romántico. El aficionado percibe que todo lo que ocurre en el césped no tiene trampa ni cartón. No hay engaño. Y eso le hace muy atractivo porque hoy día no se encuentra a nadie que te diga la verdad.
Más allá del puro juego, de los primeros puestos en las clasificaciones, de los récords históricos que caen consecutivamente, este Atlético de Madrid destila un aroma añejo lejos de peinados de moda y de perfumes de diseño que lo hace real y verdadero.
Foto del estadio Vicente Calderón: as.com
Hace cuatro partidos
La prensa amiga
Una liga aburrrida
Molestamos, luego existimos
0-1 
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Que cierto es lo que dices amigo.
El mismo domingo hablándolo con un socio de toda la vida del Atleti, sentados y pasando frio en uno de los fondos del campo (la sombra no perdona), hablábamos precisamente de esto.
Este Atleti recuerda al fútbol de hace décadas, donde sólo 1 o 2 jugadores destacan por encima del resto, pero lo que prima es el esfuerzo, el trabajo, la confrontación. Este Atleti no hace prisioneros y lucha cada balón como si fuera el último.
Pero también recuerda a este fútbol de hace años por la forma de trabajar, por conseguir una plantilla muy competitiva al mínimo coste (este tema es harina de otro costal) y por ese airete aguerrido mete goles por insistencia, muchas veces más que por calidad.
Pero este es nuestro Atleti y podemos disfrutar de él. Mientras unos tiene prensa, medios, dinero y otras muchas cosas a sus pies, nosotros lo suplimos con una cosa llamada FÚTBOL 😉
Creo que este Atleti es lo más cerca que podemos estar del Atlético de Madrid histórico.
Muchas gracias por compartir su reflexión.
Habeis dado en en clavo señores.
EL DE TODA LA VIDA. DEL QUE NOS ENAMORAMOS. EL QUE NOS HAN CONTADO NUESTROS MAYORES Y HEMOS LEIDO CRONICAS Y VISTO REPORTAJES. EL ATLETICO GANADOR.
Un abrazo.