El globo del Atlético de Madrid no se deshincha. Haciendo caso omiso a las profecías de los predicadores de los platós de televisión y de los estudios radiofónicos, el globo sigue bien hinchado. ¡Qué osadía! ¡Cómo se atreve el Atlético a porfiar su sabiduría y conocimiento! Al principio se reían, después, aprovechando el primer pinchazo del equipo, los buitres carroñeros no dejaron escapar la oportunidad de caer en picado sobre la presa que creyeron estaba muerta.
Nada más lejos de las apariencias. El Atlético seguía muy vivo. Había perdido un partido, cosa natural en una competición deportiva. Nada más. El equipo se rehizo y siguió ganando. Tanto ha ganado que ha batido varios registros históricos de una entidad centenaria.
La segunda estrategia consiste en desetabilizar una plantilla obsesionada con ganar, en palabras de Simeone, llenando páginas, webs y horas de radio y televisión con continuos rumores sobre Falcao. Claro, que para ello, cuentan con la inestimable colaboración de Miguel Ángel Gil, siempre al acecho de cualquier negocio que pudiera presentarse. Seguirán los rumores per secula seculorum mientras no haya un dueño del club que defienda los intereses del Atlético de Madrid y de sus aficionados por encima de todo.
Una vez finalizada la primera vuelta y con el equipo afianzado firmemente en la segunda plaza de la clasificación el Atlético no existe para los medios, supuestamente, informativos. Enterrado el código deontológico del periodista desde hace varios años lo único que importa es mantener el negocio. ¡Qué la realidad se ajuste a sus intereses personales o empresariales por encima del rigor informativo!
La realidad es terca y la realidad dice que el Atlético de Madrid es el mejor equipo de la Liga en casa y que es el equipo que más goles ha marcado en su feudo superando al mejor equipo de todos los tiempos. Pero eso ni cuenta ni importa. Tampoco tiene mucha relevancia que sobrepase por bastantes puntos a sus perseguidores y, aunque aún queda mucho torneo, esté en disposición de clasificarse directamente para la Liga de Campeones dieciocho años después.
Pero esto no interesa a nadie, ni siquiera a los aficionados colchoneros que lo único que se merecen son las migajas de algún canutazo extraído en la zona mixta del Calderón y aparecer en la parte baja de las webs de los diarios deportivos, siempre por debajo de las churris de turno para que no pasemos de largo sin echarlas un vistazo.
No somos los únicos, las excelentes trayectorias del Betis, del Rayo o del Málaga no merecen tampoco ninguna dedicación de los periodistas obsesionados de manera enfermiza con los dos de siempre. La Liga es mucho más que dos equipos, pero si sólo leen el As o el Marca, escuchan la Cope o la Ser y ven Futboleros y Punto Pelota no lo sabrán nunca.
Foto: Club Atlético de Madrid.
Es una lucha perdida, sobre todo mientras haya atléticos que sigan comprando o viendo esos medios, la verdad es que si yo fuera del Madrid también creo que me hastiaría de ver todos estos programas que cogen una jugada y te la repiten 1235 veces para decir que el árbitro se ha podido equivocar.
Añoro el Estudio Estadio de hace 30 años, creo que ha vuelto otra vez, pero seguro que no es como el de entonces: información, resúmenes de TODOS los encuentros, y luego el que no quiera quedarse al debate o tertulia para la cama pero habiendo visto amplios resúmenes de todos los partidos. Tampoco es tan difícil, eso sí que sería un servicio público de verdad
Como siempre un fuerte abrazo desde http://derojoyblanco.blogspot.com.es/
Efectivamente, es una lucha pérdida pero hay que seguir denunciando el ninguno sistemático al que somente al Atlético los medios.
No vi Estudio Estadio, pero sí que he leído que no tiene nada que ver con el programa que los más viejos recordamos.
Un abrazo.
Es lamentable como está ahora el periodismo deportivo, lo más importante ahora es vender y da igual el precio…
Efectivamente.
Y seguro que hay muchisimos GRANDISIMOS periodistas deportivos que no pueden ejercer porque no son ‘mediáticos’ o no venden más etc