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Les confieso que a mí me gusta más el fútbol por la tarde. Tardes de domingo en las que jugaban todos, o la mayoría de los equipos, a la misma hora. Son recuerdos de un niño que se entretenía jugando al fútbol con sus amigos mientras de fondo en la radio, se escuchaban los sonidos de todos los partidos. Las típicas voces y risas se detenían súbitamente cuando alguno de nosotros oía el pi, pi, pi que anunciaba un gol. Mientras el narrador terminaba de cantarlo, cada uno rezaba para que ese gol fuera de su equipo. Una vez enterados, vuelta a jugar.

El Atlético de Madrid se enfrentará en el primer partido de Liga al Osasuna. El partido se disputará a las 12 del mediodía del domingo en el estadio Vicente Calderón y será televisado por Canal+ Liga.

El Atleti tendrá solo dos días y medio de descanso, después de ganar holgadamente al Vitoria de Guimaraes, el jueves por la noche. La afición disfrutó de un buen partido de fútbol en el que vio a su equipo dominar la mayor parte del encuentro. Se espera un equipo con confianza en su juego.

Uno de los mayores aciertos de esta pretemporada en el Atlético de Madrid ha sido la configuración de un nuevo departamento de comunicación. Gil Marín lo anunció en el verano y de inmediato se contrató a dos responsables del mismo: Rafael Alique y J J Anaut. A pesar del poco tiempo que llevan en el club se está notando su trabajo. Los hechos más significativos han sido una mayor actividad en twitter y en facebook y el éxito de la presentación de Falcao donde se consiguió reunir a 10.000 personas. Qué duda cabe de que el departamento de comunicación no va a ganar partidos

Me temía un simulacro de partido en el Calderón, tal y como dejé escrito en el twitter justo antes de salir para Madrid. Pero, me equivoqué. El simulacro de partido corrió a cargo del Atlético, pero no del Oporto que jugó un partido como deben hacerlo los profesionales del fútbol. No se jugaban nada, bueno sí, el honor de un club y el respeto a una afición. Ahí es nada.

Hasta los cojones del Gobierno que nos sube los impuestos, hasta los cojones de los 400 chupópteros que se han ido a Copenhague por el morro con la excusa de Madrid 2016, hasta los cojones de los indocumentados, hasta los cojones de los que quieren engañarnos todos los días, hasta los cojones de trabajar, hasta los cojones de que los vikingos se rían de nosotros, hasta los cojones de pagar impuestos para financiar las tv públicas que luego no dan los partidos del Atlético y hasta los cojones de que el Atleti no gane un partido en un mes. He dicho.