El Atlético de Madrid tenía hoy una oportunidad magnífica de dar un paso al frente. El Madrid empató su duelo contra el Málaga y dejó abierta la posibilidad para un cambio de líder. El rival de hoy era un conjunto de tronío, de esos que pasan desapercibidos para la prensa, pero que en realidad, es mejor que muchos equipos de Europa con más nombre. Ni la posibilidad de ser primeros ni ganar al Villarreal fueron motivaciones suficientes.