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Todas las explicaciones que se han podido saber hasta ahora sobre el gatillazo del Atleti en el caso Juan Román Riquelme oscurecen más aún este asunto.

Aguirre habla de que la decisión de no ficharlo ha sido de cuatro personas: Pitarch, Cerezo, Gil y él mismo. Lo consideran un gran jugador pero se retrasó tanto su contratación que entendían que podía ser contraproducente. Además, continúa el entrenador, el equipo está diseñado para jugar de forma distinta al estilo que tiene Riquelme.

Después de todo el verano valorando el fichaje de Riquelme, a ratos con más, a ratos con menos intensidad, el final del culebrón llegó ayer y Riquelme no firmará por el Atleti.

Todos los medios de comunicación indican que la decisión final de no contratar al argentino ha sido tomada por decisión técnica del entrenador. Y este es para mí el punto clave. Si acierta, todos estaremos tan contentos y no nos acordaremos de que fue Aguirre quien decidió que no viniera, pero si el equipo no funciona todo el mundo le acusará de no querer fichar a un gran futbolista.

Por razones personales es posible que hasta la próxima semana no pueda escribir ningún nuevo comentario. Así que me despido de vosostros, aunque sólo por unos días.

Por cierto, me parece vergonzoso que a estas horas del lunes aún no se sepan los horarios de los partidos de la próxima jornada. Al final, como siempre, los aficionados somos los que pagamos las consecuencias del desastre de organización que es la Liga de Fútbol Profesional.

Ha llegado el momento más esperado desde que se acabó la Liga hace dos meses y medio. Y es que los futboleros no podemos vivir sin el fútbol.

Es la hora del Atleti. Esta temporada tiene que ser, no podemos esperar más. El Atleti tiene que dar un salto e incorporarse a la lista de los equipos candidatos al título. Nadie, ni directivos, ni afición, ni técnicos, ni jugadores pueden conformarse con quedar clasificados para la UEFA.

Quedan pocas horas para que comience la liga de fútbol. A mí me pasa todos los años lo mismo, siento un pequeño cosquilleo y voy contando los días que faltan desde hace dos semanas. Pero este año más aún, porque empezamos en casa de los vikingos y esto hace que aumente mi nerviosismo.

Encaramos la liga con dos decisiones que van a marcar el futuro del Atleti: la marcha de Fernando Torres y la venta del Calderón. Las consecuencias de la primera decisión ya se han podido ver: el club ha ingresado una cantidad importante de dinero que le ha permitido contratar a futbolistas buenos, de prestigio y de experiencia

Acabo de oír que el partido de España contra Grecia se va a jugar, pese a las condiciones tan lamentables que se pudo ver ayer en las que estaba el césped. Tan desastroso estaba que Luis Aragonés no quiso realizar el entrenamiento. ¿Pues si no estaba para entrenar cómo es posible que esté para jugar un partido de fútbol, amistoso, pero oficial?

Pernía recordó ayer que en un partido en un campo con un césped bastante mejor que el del estadio del Paok, el curso anterior Maxi se lesionó para seis meses. Y quién fue el máximo perjudicado, el Atleti.

Ayer se vivió una bonita noche en el Calderón. Por varias razones, una de ellas es porque el pasado reciente de nuestro equipo no es para tirar cohetes y hace tanto tiempo que no se veía jugar al fútbol así, que seguramente que la de anoche quedará en nuestra memoria por bastante tiempo.

Otra de ellas, es porque se ve que hay buenos jugadores y que además pueden hacer un buen equipo. Es indudable que este año se ha fichado bien, además de forma rápida, ya que ninguno de los fichajes se ha demorado más de lo razonable, lo contrario de otros años que hasta el último día antes de empezar la temporada no se hacía el último fichaje de la temporada