Con solo 22 años, César Ortiz es uno de los pesos pesados dentro del vestuario del Atlético de Madrid B. Pese a su juventud, la carrera de este defensa ha pasado por un sinfín de buenos pero también malos momentos y esto es algo que le ha dotado de una madurez inusual para su edad. Su liderazgo y su entrega le hacen ser pieza clave en el esquema de Milinko Pantic.
César Ortiz pasó por el último episodio del podcast Esto es Atleti y analizó su trayectoria, así como la actualidad del primer equipo y del conjunto de 2ºB. El canterano atraviesa un gran momento de forma aunque, de momento, prefiere no obsesionarse con jugar en Primera y reconoce que “veo al grupo bastante bien, pero es decisión de Gregorio Manzano. Él tiene que ver si el equipo de arriba va bien y, si no, cambiar cosas”. Incluso bromeó con su buena racha goleadora y la ausencia por lesión de Falcao en los últimos partidos: “Si me llaman, bienvenido sea, como si tiene que ser de delantero, pero de momento sigo concentrado en el B”.
El toledano habló de la importancia de tener jugadores canteranos en el equipo, capaces de transmitir la filosofía del club a otros futbolistas: “Ahora mismo, veo un buen equipo. Hay rachas positivas y negativas. Ahora hay mala racha aunque hay buen grupo. Creo que cuantos más jugadores de la casa haya, mejor”. Tres de estos hombres de la casa son Joel, Pulido y Koke, a quienes Ortiz conoce realmente bien: “He jugado con ellos y me gustan mucho. Podrían aportar muchísimo al primer equipo”.
Buen momento en el Madrileño
Pese a la última derrota en el derbi ante el Castilla, el filial rojiblanco está cuajando una buena campaña. Tras un inicio liguero dubitativo, los hombres de Pantic habían encadenado nueve jornadas sin perder, un dato cuyo ingrediente para César Ortiz es que “estamos todos muy compenetrados. Estamos en una buena racha positiva y no tenemos que perderla”.
También habló el canterano de su actual técnico, en quien confía para ocupar algún día el banquillo del primer equipo: “Le veo bien, sabe manejar muy bien al grupo y creo que es un gran entrenador”. Pese al buen arranque, Ortiz prefiere no fijarse objetivos a largo plazo de cara a final de temporada: “Vamos pensando partido a partido, despacio. No queremos pensar en Playoff porque si piensas demasiado en ellos, puedes caer abajo.
La lesión que cambió su juego
En un Europeo de categorías inferiores, César Ortiz sufrió una grave lesión que puso en jaque su brillante progresión: “Me frenó un poco. Estaba jugando con San José de titular en la Selección y fue un palo bastante duro pero me sirvió mucho”. Tras la lesión, intenté levantarme cuanto antes y acabé la temporada como lateral derecho”.
Grecia y el debut que nunca llegó
A sus 22 años, Ortiz cuenta en su expediente con una cesión poco habitual en un jugador de su edad. Estuvo cedido seis meses en el Aris de Salónica, a las órdenes de Héctor Cúper: “Me ayudó bastante. Estuve allí en una situación complicada, porque llegué a mitad de temporada y el equipo estaba hecho. Sin embargo, el míster confió en mí y jugué algunos partidos. Me querían renovar, pero me quedaba un año aquí y volví para cumplirlo”.
Ese retorno al Atleti B no fue un drama para César Ortiz que afirma que aceptó “sin pensarlo. No fue un paso atrás y hay veces que para dar un paso al frente hay que recular. Ahora estoy muy contento en el filial y ojalá algún día llegue al primer equipo”.
Por último, César Ortiz habla de una historia quizá desconocida para muchos atléticos. Durante la etapa de Javier Aguirre estuvo a punto de debutar. Sin embargo, el infortunio volvió a cebarse con él. “Aguirre no contaba con sus laterales aquel año, me probó y le gustó cómo jugaba, así que comencé a entrenar con el primer equipo en esa demarcación. Antes de un partido ante el Panathinaikos, estuve toda la semana entrenándome con los titulares, pero el míster me dijo que no me habían inscrito a principio de temporada para esa competición. Cambió mis planes, porque podía haber debutado a los 17 ó 18 años”.
Recuerdo que hace años estaba considerado como el futuro baluarte defensivo del Atleti. La lesión le frenó bastante y al final, otros que venían por detrás, como Domínguez o Pulido (aunque este no cuente nada para Manzano) terminaron en el primer equipo antes que él. Lo va a tener difícil con un entrenador que no confía en la cantera y, con la edad que tiene, no creo que le quede mucho más en el filial. Espero que tenga suerte y pueda demostrar lo que vale.
Un saludo.