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El Atlético ganó al Sevilla su cuarto partido de la temporada. Dada la falta de victorias, la de ayer se recibió con gran alegría por la afición rojiblanca tan castigada durante este curso. Ayer observé varias cosas buenas que de repetirse, pueden hacernos salir del pozo, y algunas malas, éstas ya demasiado reiterativas.

El Atlético sumó ayer tres puntos a su pobrísima cuenta de este año con un gol de Antonio López cuando el partido exhalaba su último suspiro. Tres puntos en la tabla y muchos más deben suponer para la moral de los jugadores que vieron cómo por primera vez en la temporada ganaban un partido en los instantes finales.

El Atlético no rehuyó de la pelea ante un rival que se mostró excesivamente duro, aunque con menos fútbol del habitual. Eso fue lo que le valió para seguir peleando por la victoria y conseguirla finalmente.

Los aficionados no esperamos fútbol de nuestros jugadores porque sabemos que eso en estos momentos se antoja imposible, pero por lo menos les pedimos ardor, entrega y fe en la victoria. Hicieron además algo a lo que no acostumbran, como fue aprovechar los errores del rival. Esa falta de Navarro, tremendamente innecesaria fue botada magistralmente por Siamo y rematada en un escorzo extraño, pero eficaz por Antonio López, que además completó el mejor partido de la temporada.

El equipo que puso en el césped Quique Flores, en nada se parece a los de los últimos años. Hasta siete españoles, tres de ellos canteranos formaban en la alineación inicial. Una buena noticia que a la vez demuestra el nulo sentido de la planificación que se tiene desde los puestos de mando. Cuando el año pasado era difícil encontrar a un español en la alineación rojiblanca, hoy nos encontramos con una gran mayoría de nacionales. Me parecerá bien si se mantiene, pero mal si pasado mañana se cambia de intención.

Parece que se quiere dar paso a jugadores jóvenes que provienen del filial. Digo parece, porque donde hoy juega Ibrahim, mañana puede jugar Pongolle, ah no, que éste ya se ha ido, gracias a Dios. Por cierto, me gustó bastante Ibrahim. Demostró desparpajo, valentía y sobre todo jugó el balón con bastante sentido casi siempre. Ahora hace falta saber si se le van a dar minutos, o como ocurre con la mayoría de estos futbolistas, mañana vuelve al Atlético B. Cuando se toma la decisión de subir a un futbolista al primer equipo, ha de ser definitivamente, no se puede estar confundiendo a los chicos.

Demasiadas buenas noticias para recibirlas así, todas juntas, ¿será por Santa Claus?, ¿por los Reyes Magos quizás?

El apunte: El de López es el primer gol de cabeza que consigue el Atlético esta temporada.

Corona de laurel: Antonio López, que jugó el mejor partido de la temporada y consiguió el gol de la victoria.

A los leones: el amigo Raúl García, si bien es verdad, que salía de una lesión, pero sigue sin rendir a un nivel aceptable.