forzaatleti

Gabi

Madrid

10-07-1983

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Gabi prolongó el sueño del Atleti. Ese sueño que partido a partido ha ido apoderándose de las noches de los seguidores rojiblancos. Nos hemos presentado, casi sin enterarnos, en la jornada 29 y el Atlético de Madrid sigue vivo, coleando y molestado en esta liga prediseñada para que la gane uno de los dos de siempre. Con humildad y compromiso está en condiciones de disputar el Campeonato Nacional de Liga con las mismas oportunidades que ellos. Podrán tener más millones, más atención mediática, pero hasta ahora, no han podido despertarnos.

A estas alturas del calendario ningún equipo regala nada. Se podía pensar que el Betis, debido a su posición en la tabla y después del varapalo del pasado jueves, no iba a plantear muchas complicaciones a los colchoneros. No fue así. Salió como debía: con las garras afiladas para aferrarse al Primera División con las pocas oportunidades que le van quedando. Le hizo sufrir al Atleti en muchos tramos del partido con un juego firme en la defensa y en el centro del campo. Arriba fue otra cosa muy diferente.

El Atlético entró en el juego que le propuso el Betis. Tuvo unos minutos muy buenos hacia el ecuador de la primera parte cuando Arda Turan entró en escena. Entonces, pudo adelantarse en el marcador con varias ocasiones consecutivas. De hecho, anotó un gol, pero el señor colegiado, en uno de los típicos errores de los últimos tres meses, anuló el gol de Diego Costa por presunto fuera de juego.

El partido se había ido cruzando aún más en los inicios de la segunda parte. El Atleti no encontraba el camino hacia el área del Betis. Incluso, el conjunto verdiblanco pudo adelantarse en el marcador. Solo el poste izquierdo de la portería de Courtois lo evitó.

Las faltas, las interrupciones y los enredos se sucedían con el transcurso de los minutos. El Atlético mantuvo la paciencia. Nunca pierde la vista en el objetivo, aunque el contrario le pretenda sacar del partido y, con ello, obtener la victoria. Esperó su oportunidad, como hemos visto en otros encuentros, como hace un experto cazador apostado en el monte hasta que aparece la pieza que se quiere cobrar. Entonces, en un único disparo certero y letal, derriba al animal. Hoy, ese cazador paciente e infalible fue Gabi con su magnífico lanzamiento desde fuera del área que se convirtió en el primer gol rojiblanco en el momento más necesario.

El plan se está desarrollando conforme a lo previsto. A finales de marzo, el Atleti no solo no ha caído, sino que sigue en pie.

Foto: Club Atlético de Madrid