No podían permitirse otro fallo, un inicio de temporada que desilusionase a los aficionados, era un derbi y cuando te enfundas la rojiblanca no puedes decepcionar. Tras el estrepitoso partido en casa frente al Real Madrid C, los de Santaelena se medían al cuadro azulón en el Alfonso Pérez para demostrar que este equipo, pese a todas las bajas que han sufrido en verano, quieren luchar por jugar el play-off.
Había nuevas caras y, por lo tanto, un nuevo modelo de juego que nada tiene que ver con el desplegado la temporada pasada. Aquino es el nuevo líder en el vestuario y el juego de los rojiblancos se parece cada vez más a los términos del ‘Cholismo’, con mucho esfuerzo y sacrificio. El primer tiempo fue una toma de contacto con el equipo rival, pocos desajustes en defensa y muy serios arriba, eso sí, se palpaba bastante respeto en el terreno de juego entre los dos conjuntos por miedo a encajar el primer tanto.
En el descanso, Alfredo Santaelena motivó a los suyos para que salieran al césped a conseguir la primera victoria de la temporada y, sobre todo, quitarse esa timidez y poca precisión de medio campo hacia arriba. Y así fue. La verdad que el comiendo del segundo acto estuvo condicionado por la expulsión del jugador local José Ruíz, algo que declinó la balanza hacia el lado colchonero.
Con uno más y muchos espacios sobre el césped, Elbis se inventó una obra de arte para poner el esférico en el único sitio al que no podía llegar el meta rival. Pero cómo sabemos, parece que al Atleti le gusta sufrir a veces, así que nada más ponerse en superioridad el colegiado decidió expulsar a Vicente, en el minuto 60, igualando las fuerzas con los de Getafe.
El momento clave del encuentro llegó en el tramo final del partido, precisamente en el minuto 83, cuando Santaelena decidió sacar del campo a Aquino para dar entrada a Héctor. Nueva perla rojiblanca. Al joven futbolista le bastaron ocho minutos para anotar tres goles que dejaban más que sentenciado el encuentro. Al minuto, el delantero empujó el balón hacia el fondo de las mallas tras una buena combinación atlética; en el 87, Héctor le cruza la pelota al portero sin que éste pudiera evitarlo; y para finalizar, ya en el descuento, anotó el último gol con el desparpajo de los grandes goleadores.
A pesar de la abultada victoria (0-4), el filial tiene que mejorar muchas cosas ya que las expulsiones siguen persiguiendo a este equipo desde la temporada pasada. Vicente y Elbis tuvieron que ir al vestuario antes de tiempo, algo que no sentó nada bien al entrenador. Sin embargo, ya están aquí los tres primeros puntos de lo que puede ser una gran temporada, con conocidos y jóvenes como Héctor que vienen pisando fuerte a los más consagrados. Prepárense porque este año nos vamos a divertir con los chavales.