Liga
Jornada 20
Atlético 1
Sevilla 1
Atlético: Courtois, Juanfran, Miranda, Godín, Filipe Luis, Gabi, Koke (Sosa, 88'), Arda Turan, Raúl García, Diego Costa, Villa (Rodríguez, 81')
Sevilla: Beto, Coke, Fazio, Pareja (Gameiro, 45'), F. Navarro, Carriço, Iborra, Vitolo (Marin, 64'), Rakitic, A. Moreno, Bacca (Reyes, 84')
Goles
1-0 Villa (19')1-1 Rakitic (pen., 72')
El Atleti no va a bajar los brazos por un empate. La confianza, ganada a pulso, es tan grande y está tan fundamentada que eso es imposible. No va con el carácter de estos jugadores ni del entrenador. Ya nos lo han demostrado en otras ocasiones y lo van a seguir haciendo. El Atlético de Madrid se ha ganado el respeto y el reconocimiento de propios y extraños. Lo ha hecho con esfuerzo y dignidad. Sin que nadie les haya regalado nada. Por todo esto, el mérito de la temporada es enorme. No se nos va a caer el equipo por un empate, celebrado como si un triunfo por los sevillistas.
El Atleti sabía que el Barcelona había empatado en Valencia y comenzó a jugar el partido como siempre. Se puso por delante con un gol de Villa, rematado después de un despeje pifiado de Beto. El gol llegó después de unos veinte minutos de dominio absoluto por parte de los rojiblancos. El centro del campo, sin el mediocentro defensivo de costumbre, era capaz de imponerse al centro del campo sevillista. No era necesario porque mientras se tenga la pelota no hace falta defender.
Aunque se dominó, no hubo ocasiones claras por parte del Atleti. El Sevilla es un equipo rudo, con gran fortaleza física y algún jugador destacable. No tuvo ningún problema en seguir con las líneas bastante retrasadas, como si no fuera perdiendo. Partidos como éste veremos muchos en lo que queda de la temporada. No les avergüenza jugar a la defensiva.
La segunda parte fue distinta. El partido pasó a tener doble sentido. El Sevilla se aventuró más allá de la medular por primera vez en todo el encuentro. Quedó una panorámica más favorable a los colchoneros. Se tuvieron varias ocasiones de salir al contraataque. Los centrocampistas no supieron dar la salida necesaria a la pelota cuando hubo oportunidad. Hay algo que no funciona cuando Koke juega en el centro. Quizás no se tengan todos los datos para valorarlo en su justa medida porque se le ve que ha perdido el punto de forma físico que tenía antes. Sin embargo, los hechos indican que rinde más cuando juega en la derecha que cuando lo hace más centrado.
El partido se fue afeando por la perspectiva que tenían los sevillistas de que el partido lo podían empatar. Cuando no hay fútbol hay que recurrir a otras artimañas. No lo censuro. Eso forma parte del juego y es el árbitro el que tiene que gobernar el partido. El de anoche no lo hizo y dejó que todo se fuera ensuciando.
Las jugadas polémicas se fueron sucediendo: feas entradas de Carriço, el penalti a Raúl García no castigado y el sí señalado de Juanfan a Bacca. Además de un puñetazo al hígado de Fazio a Diego Costa dentro del área que no vio el colegiado. El Sevilla recogió el fruto de su juego. Arriesgó en su apuesta y ganó con la inhibición del trencilla. Me niego a pensar que este arbitraje haya estado premeditado a raíz del empate culé. Si pensara así no vería los partidos. Sí que estoy convencido de que el penalti a Raúl García hubiera sido pitado en el Bernabéu y en el Camp Nou, así como se hubiera pasado por alto el agarrón de Juanfran. Ésa es la injusticia: no tratar a todos por igual, no que los árbitros se confundan o no vean ciertas jugadas.
El Atlético no sintió vértigo aunque es lo primero que han titulado la siempre original prensa deportiva. ¡Cómo va a tener vértigo un equipo que lleva tantas jornadas empatado con el primero! Le sobró derroche físico y, a mi juicio, buen juego en la primera parte, aunque escaso de peligro. En la continuación no supo templar el partido, jugar con sabiduría e inteligencia. Fue por eso por lo que no pudo ganar.
La ilusión por ponerse líderes era tan grande y estaba tan al alcance de la mano que es lógico tener ese punto de frustración cuando se ven tan cercano el objetivo y no se consigue. No es el momento de flaquear, sino de seguir trabajando con las mismas directrices que hasta ahora. El premio llegará y si no llega que no puedan decir que fue porque nos rajamos o porque abandonamos nuestros principios.
Foto: Club Atlético de Madrid
Buen análisis Julio.
Yo tampoco creo que sea el vértigo de vernos arriba en solitario, lo que pasa es que estamos pasando por un bajón físico generalizado y especialmente notorio en el caso de Koke y Diego Costa.
El primero lleva varios partidos desaparecido y el segundo, aunque sigue corriendo y peleando por cada balón, parece que le falta esa frescura que tenía antes del parón en los metros finales.
De todas formas, no es algo que me tenga demasiado preocupado porque sé que el Cholo lo sabrá gestionar. Me preocupa más la falta de confianza en el banquillo. Ayer hubiera sido un buen día para salir con Gabi y Guilavogui en el centro y mantener a Koke en la derecha.
Un saludo desde http://www.paseomelancolicos.com
Creo que es lógico y hasta necesario que se produzca esa pérdida del nivel físico. Si lo mantuvieran todo el año serían máquinas, no hombres. Así que confiamos.
Un saludo.
Ciertamente y, como he leído a Jorge Ordás en esta misma web, sería incluso sospechoso.
Lo que pasa es que al final Simeone tendrá que contar con alguno más a parte de los 12 habituales. Porque ahora vuelve Mario, pero supongo que tardará un poco en entrar en el ritmo vertiginoso de este grupo.
Un saludo.
Esto es el enero maldito ese del que ya hablamos aquí usted y yo don Julio.
Además del nivel físico hay una falta de nivel creativo preocupante puesto que, ni cuando el campo se abrió con la salida del Sevilla al ataque, el equipo fue capaz de tirar a puerta… Ni cuando tocó remontar. Lo más inquietante y diferente fue el tiro de Raúl García. Creo que este puede ser el lastre que nos impida lograr algún título. Con todo, la temporada está siendo espectacular.