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El Atlético de Madrid C parece que definitivamente ha encontrado el camino del triunfo, ya que, con este partido, es la segunda victoria con goleada que realiza el cuadro de Óscar Mena. El equipo rojiblanco se impuso por 1-3 ante el CD Griñón, donde el protagonista del partido fue Dani Aquino que sumó dos goles más a su cuenta personal.

El ariete, que llegó en el mercado invernal, ya es de los máximos goleadores del equipo con cinco tantos, números increíbles en tan poco tiempo. El delantero ha dejado con la boca abierta a todos los aficionados de las categorías inferiores del Atlético de Madrid, ayer se echó el equipo a la espalda y demostró la clase que tiene, volviendo loca a toda la defensa local. Con jugadores como éste la afición debe estar tranquila, ya que si Aquino sigue enchufado de cara a puerta el objetivo será mucho más fácil.

El partido se puso pronto de cara; pues en el minuto 24, Aquino recibió un pase en profundidad de Calero quedándose solo ante el guardameta. El delantero, lejos de ponerse nervioso, dio una lección de calidad y anotó el primer tanto con una preciosa vaselina por encima del guardameta.

Ya en la segunda parte, Iván Calero remató un centro colgado desde la banda para poner el dos a cero en el minuto 51. Un duro golpe para la afición local que veía como los chavales se alejaban en el marcador cinco minutos después de volver del descanso.

Para rematar la faena, en el minuto 70, Aquino pudo aprovecharse del despiste de la zaga local y con un desmarque plantarse solo ante Víctor, portero del Griñón. El rojiblanco en su envite personal con el guardameta, pudo mandar el balón al fondo de las mallas definiendo con mucha tranquilidad con su pierna derecha.

En el minuto 89, los locales, con uno menos, pudieron maquillar el marcador con un gol de Javi Gómez. En estos momentos el Atlético C se sitúan en mitad de tabla, con una tranquilidad que hasta hace dos jornadas no tenían. A pesar de la posición, siguen estando a cinco puntos del descenso, por lo que deben seguir contando de tres en tres para olvidarse definitivamente de los puestos de peligro.