Europa League
Semifinal
Atlético 4
Valencia 2
Atlético: Courtois, Juanfran, Miranda, Domínguez, Filipe Luis, Gabi, Mario Suárez, Arda Turan (Tiago, 82'), Diego (Perea, 88'), Adrián (Salvio, 90'), Falcao
Valencia: Diego Alves, Ricardo Costa, Rami, Víctor Ruiz, Jordi Alba (Piatti, 72'), Feghouli (Canales, 72'), Tino Costa, Topal, Mathieu, Jonas (Aduriz, 80'), Soldado
Goles
1-0 Falcao (17')1-1 Jonas (45')
2-1 Miranda (49')
3-1 Adrián (54')
4-1 Falcao (78')
4-2 Ricardo Costa (93')
El Atlético de Madrid repartió anoche alegrías a raudales. A los suyos por realizar un partido soberbio, digno de pasar a la historia de las grandes noches europeas y a los otros por regalarles dos goles en los últimos segundos de cada tiempo que les procuran algunas opciones de superar la eliminatoria cuando ya las creían todas perdidas. Equidad salomónica. Un estupendo resultado, si no hubiéramos visto cómo el Atlético arrolló al Valencia en su mejor partido de la temporada.
El Atleti salió sin especulaciones y con grandeza. A darlo todo hasta entregar la última gota de sudor. Fuera miedos, en el corazón el deseo de ganar. Desde el primer instante, sin concesiones. El Valencia se vio primero sorprendido y luego impotente de detener el vendaval de fútbol constante que desplegó el Atleti durante todo el partido. El resultado, visto con frialdad, puede dejar esperanzados a los valencianistas y cierto punto de enfado entre los seguidores colchoneros. Sin embargo, el Atleti sale reforzado mental y futobilísticamente de este primer envite.
Liderados por sus cuatro mejores jugadores, el Atleti hizo disfrutar a sus aficionados de un espectáculo enorme. La pelea de Turan, la clase de Diego, la sutileza de Adrián y el extraordinario instinto goleador de Falcao aparecieron en el momento más oportuno de la temporada: una semifinal europea, para aniquilar a un Valencia que solo pudo deambular por el campo.
Daba la sensación de que más que un rival de semifinales los chés eran un sparring a los que los colchoneros se hubieran encontrado a la entrada del Manzanares. El Atleti firmó una segunda parte sensacional con tres goles, sobre todo uno de Adrián y, por encima de todos, otro de Falcao para el recuerdo.
Esta vez el asturiano no recurrió a la pausa. La jugada requería velocidad. Y Adrián se la imprimió. Desde medio campo hasta el área lanzó un sprint vertiginoso que le permitió superar a la defensa valencianista. Sus piernas se movieron deprisa, pero su cerebro continuó en su habitual estado de reflexión al entrar en el área y con toque de un maestro, que domina su disciplina, puso el balón inalcanzable para Álves. Adrián tiene gran variedad recursos para resolver cualquier situación que se produzca en el juego lo que le convierten en estupendo futbolista y que si alcanza la regularidad lo transformarán en un futbolista extraordinario.
El éxtasis llegó con el segundo gol de Falcao. El balón le llegó desde las botas de Diego en un cambio de juego que bien ejecutados son tan eficaces, pero que rara vez se pueden ver en el fútbol moderno. El colombiano recibió la pelota y se adentró con ella en campo contrario. No quiso entrar en su terreno favorito. Prefirió correr por el alambre de cal sorteando a los rivales que, inocentes ellos, querían evitar su disparo. Falcao no se aturulló como en otras ocasiones, y fue progresando hasta alcanzar la media luna del área.
El tiro era complicado porque la situación del jugador y del balón con respecto a la portería no era la idónea. Pero Falcao lleva el gol en las entrañas y nada se puede oponer entre él y el marco contario. Esta vez tampoco. Aún con la dificultad mencionada, sacó un zurdazo explosivo que llevó el balón hasta la mismísima escuadra. Un monumento de gol.
El que más y el que menos, empezó a echar cuentas de cuánto le podría costar un viaje a Bucarest -que no está la economía para despilfarrar y hay que mirar mucho la cuenta corriente-. Hubo quien, incluso, empezó a tirar de agenda para contactar con amiguetes con los que desplazarse a la capital rumana. Pero el Atleti gestionó horriblemente los minutos de prolongación del partido. En vez de ralentizar el ritmo de juego para terminar el partido sin ningún sobresalto se dedicó a entregar gratuitamente balones al contrario.
El Valencia, nada que perder, se lanzó en pos de un segundo gol que le diera la vida. El Atleti le facilitó enormemente la tarea. En un córner, defendido de manera infame por la defensa rojiblanca -resbalón mediante del portero- anotó el segundo gol que deja la eliminatoria irresuelta hasta el próximo jueves, 26 de abril, día del 109º cumpleaños del Atlético de Madrid. Esperemos que esta vez tengamos motivos para celebrarlo. Los regales: un viaje a Bucarest y una final europea.
Cuánto tiempo hacía que no disfrutaba tanto viendo al Atleti jugar. Dándolo todo al 100% (¿Por qué no dan cada partido al menos el 70%?). Lástima de este engañosísimo resultado para la vuelta. Se jugó un partidazo que creo nadie ni soñaba, pero no paro de pensar que si ellos marcan allí en cualquier jugada vamos a sufrir de lo lindo, y presionarán al árbitro un montón. Será clave cómo plantee el partido el Cholo, como salgamos a encerrarnos llevamos las de perder.
Aunque si lo hacen como hoy no creo que nos ganen por dos goles, podemos incluso ganar.
Saludos, Aúpa Atleti y siento si mi comentario ha sido un tanto agorero.
Salí muy enfadado, sobre todo por el segundo gol que concedió el Atleti en el último instante de partido. Ahora, pasadas unas horas, soy más optimista que el minuto después de pitar el árbitro. Un 4-0 hubiera sido lo más justo, pero en el fútbol no cuentan las justicias-injusticias, sino los goles.
Un saludo.
Cuantas veces es injusto el resultado?? Al menos esta vez hemos ganado y tenemos esta ventaja. La de veces que hemos perdido los tres puntos injustamente y por eso no estamos en champions… pero el atleti es así: tenemos que sufrir hasta el final. Es triste pero no nos queda otra, siempre nos pasa lo mismo!! Aún así, las victorias sufridas son las que más se disfrutan y la del próximo jueves nos va a saber a gloria!!
Yo creo que ambos goles fueron evitables, el primero por parte del árbitro y el segundo por parte de nuestra defensa.
Aún así, no podemos rasgarnos las vestiduras y pensar en esos goles. El Atlético fue muy superior y no hay razones para pensar en que no lo sea en el partido de vuelta también.
Julio.