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Hay gente que nace estrellados y otros con estrella. Hay quienes nacen morenos o rubios, altos o bajos, guapos o feos. Hay quien convierte en otro todo lo que toca y quien lo hace en miseria. Hay futbolistas que nacen para marcar goles y otros que no marcan uno ni a la Puerta de Alcalá. Falcao es un de esos futbolistas que tiene el gol en las entrañas. Con el alma futbolera marcada con el hierro del gol.

Tras el partido de Valencia, algunos ya empezaban a dudar de Falcao. El colombiano lleva varias temporadas anotando un gran número de goles y no había, ni hay motivo para pensar que esto no vaya a seguir siendo así. Hoy lo demostró con tres goles en su primer partido en el Calderón. Cada uno diferente, los tres demuestran la capacidad goleadora de Falcao. El Tigre fue protagonista del partido, pero no fue el único.

Otro de ellos fue Arda Turan que apareció por todas las zonas del césped del Calderón ora robando el balón, ora dándoselo a un compañero, ora dando dos pases de gol. El turco dio un curso de fútbol durante todo el partido. Su gran figura se mostró en la primera parte y se agigantó en la segunda con la ausencia de Diego. Turan está feliz en el Atlético de Madrid. ¡Lesiones, aléjense del turco!

De todos los protagonistas el que más disfrutó del encuentro fue el balón, la pelota, el esférico. Tanto tiempo maltrado en la ribera del Manzanares, ayer se dio un baño de multitudes. Mientras Reyes y Filipe se lo pasaban, el balón, la pelota, el esférico no paraba de saludar a la grada. Si eran Turan y Perea,  se deshacía en reverencias tratando de corresponder a los vítores que se escuchaban desde la tribuna. Si ahora recorría el centro del campo, el balón, la pelota, el esférico giraba sobre sí mismo saludando efusivamente a todos los espectadores que poblaban los graderíos. El balón, la pelota, el esférico salió feliz y contento. ¡Hacía tanto tiempo que no se le trataba tan bien por estos lares!

Y así salieron padres e hijos jugando al balón, la pelota, el esférico Paseo de los Melancólicos hacia Pirámides tratando de emular a quienes son desde ayer sus nuevos ídolos.

Aún es pronto. Demos tiempo al tiempo. Y es que como recordaba Manzano únicamente llevan diez días entrenando juntos. Visto así, parece un milagro que se pueda jugar al nivel que han ofrecido contra el Rácing de Santander. Pese a la gran noticia que supone que hoy en el Calderón se hayan visto fútbol y goles, en el mismo partido, a mi juicio, la mejor noticia de todas es que el Atlético de Madrid solo puede mejorar. Aunque si, como declara Guardiola, lo normal es que el Barcelona no gane ningún título y el Madrid va a luchar por no descender, los colchoneros estamos dispuestos a sacrificarnos y ganar los tres títulos de la temporada; y no se hable más.