forzaatleti

La gastronomía española es rica en variedad y calidad. No hay más que ver a los extranjeros cuando vienen a España cómo se comen esas paellas valencianas, ese gazpacho andaluz o esa fabada asturiana. La confirmación de esto que digo la tenemos los españoles cuando salimos al extranjero, ¡cuánto echamos de menos la tortilla de patata, por ejemplo!

Sería difícil elegir uno de entre todos los platos que sea el más representativo de nuestra cocina. Más sencillo sería si tuviéramos que elegir un desayuno, ése sin duda sería el chocolate con churros. Ahí no habría duda. Un chocolatito espeso y humeante con unos churros recien hechos o unas porras (recuerdo unas de Arenas de San Pedro, gloriosas), no hay quién lo mejore.

Así estuvo el Atleti ayer, espeso como el buen chocolate. No hubo manera de que jugara con un poco de fluidez y rapidez como había ocurrido en partidos anteriores. Cuando había pasado un cuarto de hora parecía que el equipo empezaba a dar ritmo a la circulación de la pelota y entonces, se produjo la lesión de Maniche.

Como dije en el artículo anterior Seitaridis tiene más peligro que los atacantes contrarios, pero no podía imaginarme que sería capaz de lesionar a un compañero. Ah, pues ahí lo tienen, todas las cosas pueden empeorar y el juego del griego no es una excepción. No lo hizo a propósito dirán, sólo faltaría, digo.

Y que me cuentan de Pernía, ¡qué desastre! A mí me gusta estar del lado de los débiles: defender al niño con el que todo el mundo se mete en el cole, a la ancianita que no respetan los coches cuando va a cruzar la calle, pero miren Mariano, ya es una causa perdida y por ahí no paso. No quieron que en el próximo partido, todo el Calderón me señale y diga, mira ahí está el único que defiende a Mariano. Es a este equipo, lo que el exceso de leche al chocolate.

En una segunda parte bastante mala, sólo destacaría positivamente, la jugada del segundo gol que nos dio el triunfo, tres puntos y a seguir soñando.

Corona de laurel: Ujfalusi y Pongolle. Hoy se la tendrán que repartir. No soy capaz de distinguir a uno por encima del otro.

Cuchara de palo: para Pernía. Indudablemente el peor del partido. Provocó un corner innecesario y otra falta en el lateral del área al final del partido que casi me da un síncope.