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Llegaba el Atlético a La Romareda con todos los fantasmas detrás y todo apuntando a una nueva derrota. Para empezar, el Atlético no ganaba en Zaragoza desde hacía más de 5 años, desde el 21 de enero de 2006, cuando venció por 0-2 con goles de Torres y Maxi. A eso había que sumarle las 5 derrotas consecutivas que el Atleti llevaba encima, en las que tan sólo había conseguido anotar 1 gol, el de Reyes la semana pasada. Además, Agüero nunca le había metido un gol al Zaragoza en los 7 partidos que había disputado contra los maños y llevaba 5 partidos sin marcar. Y si además enfrente están Braulio, Sinama, Gabi, Leo Franco y Aguirre, con la suerte que tiene el Atleti con sus ex, todo pintaba muy mal. De haber perdido, hubiera igualado las 6 derrotas consecutivas de la temporada 1935/36.

Pero había un dato importante que no se podía dejar pasar. Ayer cumplía años un niño cuyos apellidos son Agüero y Maradona. Su padre, muy detallista, no quería irse del partido sin dedicarle un gol, así que lo hizo como sólo él sabe hacer. Melón de Forlán para el Kun en la frontal, éste controla, amaga, recorta hacia dentro con un cambio de ritmo terrible y dispara con la derecha. Golazo. Adiós rachas negativas. Felicidades Benjamín.

La otra nota positiva estuvo en la titularidad de Koke. Lo siento por las televisiones y periodistas que se pasaron toda la noche diciendo que era el debut del canterano como titular. No. Koke ya había jugado de titular en Liga la temporada pasada en la jornada 38 frente al Getafe. También había sido titular esta temporada en la vuelta de dieciseisavos de final de Copa frente al Universidad de Las Palmas. De debutante, nada.

Quique confía en Koke más que confía en Juanfran (que ni jugó) o en Elías (que jugó 7 minutos). Ayer hizo un partido bueno, sin alardes pero sin fallos. Quique lo tiró a banda izquierda y por allí no pasó nadie, para alegría de Antonio López que no tuvo dificultades. Este chaval va a ser alguien en el Atleti, ya verán.

El Zaragoza, por su parte, hizo un partido bastante malo. El peso del partido lo llevó el Atlético, que tuvo las mejores ocasiones. A los 2 minutos de juego, el Atlético ya había tirado 2 veces a puerta y forzado 2 córners. Braulio y Sinama no hicieron nada. En la segunda parte salió Bertolo por el francés, y sólo cuando salió Uche el Zaragoza creó cierto peligro. En los últimos minutos, los maños tiraron dos balones al larguero y nos metieron el miedo en el cuerpo. Ya saben, el Atleti si no gana sufriendo no es el Atleti.

El Zaragoza hacía lo único que sabe hacer: pegar patadas. El más perjudicado, como siempre, fue Reyes. Y el árbitro, como siempre, dejaba sin pitar la mayoría. Los 2 últimos partidos de Reyes contra el Zaragoza habían sido copias de éste. Se iba de todos con regates y velocidad, recibía una patada que no pitaba el árbitro. A Reyes se le hinchaban las narices y acababa expulsado. Anoche parecía que iba a ser expulsado también, pero el sevillano se lo pensó mejor y desapareció del partido en la recta final.

Y hablando de desaparecidos. Forlán ya no juega en el Atleti. Nadie sabe dónde juega, ni dónde está pensando que jugará la próxima temporada, pero aquí no. Creo que ayer fue el peor partido que le he visto a Forlán. No presionó, no tiró a puerta, no hizo desmarques. Nada de nada.

Pero bueno, el Atlético se llevó los 3 puntos, importantísimos para su lucha por puestos europeos. Victoria fuera de casa y borrón y cuenta nueva en las rachas negativas que arrastrábamos. Y ahora, a esperar al Sevilla.